Como el Sol naciente, debemos darle un comienzo positivo a nuestra vida, para que esté llena de realizaciones.
La sociedad es una gran escuela donde aprendemos a conocernos. Sócrates sale a las calles de Atenas y la sociedad no valida sus expectativas. Esto lo hace mirar hacia adentro, y consecuentemente se encuentra a sÍ mismo.
"CONÓCETE A TI MISMO Y CONOCERÁS EL UNIVERSO"
Esta frase tan significativa nos da una clave para entender a nuestra sociedad. Mirar hacia adentro es un espejo para ver lo que hay fuera de nosotros. El proceso de conocernos por dentro es quizás la tarea primordial de la vida. Dicho proceso es inherente a la experiencia de vivir.
En la búsqueda de nuestro ser, la vida nos llevará por innumerables caminos y experiencias, y nada será innecesario; hasta lo que creemos inservible.
Vivir, observar, pensar abiertamente, mirarnos por dentro y saber dónde estamos en relación al universo que nos rodea, y qué papel nos corresponde ante lo que vivimos, es fundamental para fraguar una vida llena de realizaciones.
Uno de los retos más grandes que tenemos en la vida es el definir nuestra identidad. Quién soy, para qué existo. Este reto no debe ser definido por fuentes externas a nosotros. De hacerlo así, llegaremos al final de la vida con la pena de haber asumido misiones ajenas a nuestra conciencia.
Más que en la felicidad, el ser humano encuentra satisfacción en el sentido de propósito, el cual es un estado de conciencia en el que el individuo siente vivir por una razón; y disfruta el camino de su razón de vivir, aunque en el caminar se presenten dificultades.
Por otro lado, hay personas que en medio de la felicidad que supuestamente proclaman, viven en un vacío existencial. Y sufren, siendo paradójicamente felices.
A la humanidad hay que recordarle constantemente que "el toque humano" no se puede perder. Y que debemos encontrar lo que somos: Urgentemente.
En el camino de conocernos seguramente encontraremos un propósito social o razón de vivir. Una vida que se prolonga sin sentido: La peor tortura del tiempo.
Muchos de nuestros genios fueron estudiantes que no demostraron una inteligencia sobrenatural, según los parámetros de la educación, pero su visión interior fue más grande que las limitaciones que encontraron en el camino existencial.
Cada ser humano tiene un evento especial que toca la profundidad del alma, motivando una redirección de la vida. En el caso de Gandhi, una experiencia de violación de derechos humanos crea en él un despertar hacia la lucha social.
TODOS TENEMOS ALGO QUE NOS MOTIVA
Lo importante es encontrar esa motivación interior y seguir el impulso de cambio. No importa dónde nos lleve. El mundo moderno es profundamente espiritual, pero paradójicamente vive lleno de conflictos e irracionalidades. No hay una estadística que indique realmente cuántos viven en el mundo sin un propósito existencial, pero deben ser muchos. Una vida vacía que se prolonga sin sentido es la peor tortura del tiempo. Esto nos lleva a pensar que para muchos: Es hora de pensar hacia dónde van en la vida, y hacer algo!
EL AUTOSABOTAJE DE TU OBJETIVO
¿Cuántas fueron las veces en las cuales realmente deseaste hacer algo y simultáneamente te dijiste que nunca ibas a poder lograrlo? ¿En cuántas ocasiones evitaste emprender un nuevo proyecto simplemente por creer que no eras lo suficientemente capaz para cumplirlo? ¿En cuántas oportunidades te desalentaste a ti mismo repitiéndote una y otra vez que las cosas iban a ser muy difíciles, que no tenías la experiencia necesaria, o bien que no eras lo suficientemente inteligente como para alcanzar aquel objetivo que tanto anhelabas? Demasiadas ¿verdad?
Lamentablemente no eres la excepción. La mayoría de las personas utilizan, continua y reiteradamente, ese mismo proceso que denomino ‘autosabotaje'. Algunas lo hacen cuando inician una dieta para adelgazar, cuando intentan dejar de fumar, o bien cuando deben rendir un examen. Otras, utilizan este destructivo proceso cuando se presentan a una entrevista de TRABAJO, cuando deben hablar en público, o bien cuando desean iniciar una conversación con alguien desconocido.
Debemos entender que cada vez que nos decimos cosas tales como: "Todo me sale mal... No voy a lograrlo... Esto va a ser muy difícil...", nos estamos autoprogramando para fracasar. Cada vez que visualizamos posibles situaciones futuras en las cuales nos desenvolveremos en forma insatisfactoria, estamos induciendo (sin ni siquiera darnos cuenta) esa misma situación que tanto queremos evitar. Y esto va más allá de tratar de ‘ser positivos' y optimistas. Esto se relaciona con entender la forma en la cual funciona nuestro cerebro: Al pensar y visualizar, estamos creando experiencias (neuroasociaciones) que nuestro cerebro tomará como válidas y verdaderas, aun cuando ni siquiera hayan sucedido. Estas visualizaciones nos afectan de dos maneras bien definidas: Por un lado, cambian nuestro estado de ánimo en forma inmediata (al visualizar situaciones negativas entramos en un estado interno desagradable y limitante). Por otro lado, controlan y dirigen nuestra atención consciente (al concentrarnos en algo que no queremos que suceda, dejamos de prestar atención en lo que sí deseamos obtener).
Deja de ser tu peor enemigo. Deja de aceptar de ti mismo lo que no aceptarías de otra persona. Comienza a darte palabras de aliento y entusiasmo. Comienza a visualizar la vida que realmente te gustaría vivir. Cuando lo hagas, no sólo alcanzarás tus objetivos, sino que más importante aún, disfrutarás del proceso para lograrlos.
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